
Con el paso del tiempo, el mentón pierde estructura, se contrae y reduce su firmeza, provocando el hundimiento del labio inferior y un desdibujamiento del óvalo facial.
Para la recuperación del mentón utilizamos un ácido hialurónico especialmente diseñado para esta zona, con un gran potencial reestructurante. Se inyecta a través de una fina cánula en un plano más profundo, proyectándose el mentón desde el interior y evitando los antiestéticos bultos.
Este tratamiento además de para contrarrestar esos signos de envejecimiento está indicado para pacientes con retrognatia (retraimiento de la mandíbula inferior) y microgenia (barbilla pequeña).
El tratamiento se realiza en apenas treinta minutos tras los cuales ya se aprecian resultados, aunque es a las cuatro semanas cuando alcanzan todo su potencial.